- Países
- España
- Distancia
- 320 km
- Duración
- 6 días
- Terreno
- Colinas suaves
- Dificultad
- Media
- Año
- 1998
- Fechas
- 3 Ago 1998 al 8 Ago 1998
Dos años después de la anterior ruta, continuamos por la costa de Galicia.
Partiendo de donde lo habíamos dejado la vez anterior, desde Noia, circundamos las Rías hasta A Coruña.
Aunque en general, toda la costa gallega es llana, ya empezamos a saborear las primeras cuestas, habituales en los acantilados de «A Costa da Morte» (la Costa de la Muerte), conocida por este nombre por lo peligroso de sus aguas y ser cementerio de muchos barcos y marineros.
Ruta de 6 días, del 3 al 8 de agosto, en los que recorrimos 320 km.
Noia – Ponte Nafonso
El comienzo no podía ser mejor; reventón de un neumático nada más salir de Noia.
La mala suerte nos esperaba en el puente sobre el río Tambre.
No hay reparación posible y son casi las 8 de la noche, así que no nos queda otro remedio que pasar la noche allí.
En Ponte Nafonso montamos la tienda en un parquecito a las orillas del río.
Ponte Nafonso – Carnota
En una tienda de bicis de Noia compramos un neumático nuevo, lo montamos y emprendemos el camino.
Bordeamos la ría, primero hay una pequeña ascensión, pues ahí remata la sierra de Outes, pero la pendiente es pequeña. Después se desciende hasta llegar a Muros. Recomendamos la parada en este pueblo.
Finalmente llegamos a Carnota, sobre todo, famosa por su playa, las más larga de Galicia con sus 7 km.
Carnota – Muxía
Dejamos la playa y bordeamos la costa hacia el norte.
Llegamos a Cee y de allí subimos un buen tramo hacia el cabo Finisterre, el fin de la tierra, según los romanos.
Las vistas son impresionantes, mar, mar y sólo mar en el horizonte.
Retornamos a Cee y continuamos hacia Muxía. Toda la zona es preciosa, en plena Costa da Morte, el paisaje es escarpado, la altura de los acantilados es elevada.
Se nota en el trazado de la carretera, las pendientes son continuadas.
En Muxía decidimos dormir.
Muxía – Laxe
Pedaleamos en dirección a Ponte do Porto, donde descansamos tomando unas nécoras y unas cervecitas.
Después del merecido descanso vamos a Camariñas, pueblo marinero conocido mundialmente por el encaje y sus palilleiras. Todos los años hay muestras y certámenes en los que se exhiben las obras de éstas mujeres, pues son mayoría de mujeres las que se dedican a esta labor.
Nuestro siguiente objetivo es Camelle. Tal era la fijación de hacer la ruta paralelos a la costa, que acabamos cruzando un zarzal durante una hora, hasta llegar a Camelle llenos de arañazos.
Allí visitamos el Museo del Alemán, conocido por sus vecinos como Man. Manfred era un hombre de avanzada edad que vivía como un robinsón, vestía solamente un taparrabos y su casa era una caseta entre las rocas.
Murió en el año 2002, pocos meses después del vertido del Prestige que dejó cubierto de chapapote el pueblo de Camelle.
Después seguimos hasta llegar a Laxe, donde acampamos cerca de la playa. Este pueblo es el televisivo Porto Zás de la serie Mareas Vivas (TV de Galicia).
Laxe – Malpica
La ruta discurre sin ninguna incidencia interesante.
De noche acabamos en Malpica, justo en plena festividad local. Unas fiestas recomendables.
Malpica – A Coruña
La etapa final no iba a ser la más fácil.
Se notan bastante las pendientes cuanto más nos acercamos a A Coruña, sobre todo en el tramo final desde Arteixo.
Toda la zona está muy desarrollada industrialmente, allí se ubica Inditex y su complejo textil y muchas otras empresas que se han instalado en el área, con lo cual el paisaje ya no es tan agradable, además como circulamos por el interior, no hay mucho que ver.
Finalmente llegamos a A Coruña.
La romana Torre de Hércules nos esperaba y al fondo los restos oxidados del petrolero Mar Egeo.
Esta ruta recorre España, Galicia